Los timbres de la puerta, también llamados interfonos, son muy populares en el mundo de los negocios. Utilizados principalmente como parte de los sistemas de seguridad, las empresas los utilizan para conceder acceso a determinadas personas a áreas seguras. La mayoría de las personas los han utilizado alguna vez y muchos de nosotros los usamos todos los días para entrar en un edificio, oficina, escuela o almacén.
Durante los primeros días de la instalación de VoIP, la pérdida de acceso a los timbres de la puerta y a los sistemas de seguridad era una de las desventajas de cambiarse a VoIP. Pero en 2018 ya no ocurre esto. La industria ha recorrido un largo camino desde ese momento en el que al actualizar a VoIP se perdían funciones esenciales, como las llamadas de emergencia, timbre de la puerta, faxes, etc.
De hecho, ahora puedes integrar el timbre de la puerta y el interfono en tu VoIP o entorno UC. Es posible que necesites comprar nuevos componentes o reutilizar el hardware existente para adaptarse a la nueva red. Conectar el timbre de la puerta a un teléfono VoIP también te da acceso a nuevas funciones que no estaban disponibles antes con los sistemas analógicos.
Mucha gente piensa que los timbres de la puerta son un producto de nicho, pero la realidad es que las empresas los utilizan mucho. Hospitales, hoteles, escuelas, almacenes o centros con servicios de asistencia para personas son solo algunos ejemplos que primero nos vienen a la mente. También se utilizan a modo de comunicación en áreas, tales como ascensores o laboratorios científicos, como parte de los sistemas de emergencia.
Cómo conectar el timbre de la puerta a un sistema de VoIP
Conectar la cerradura de la puerta a un sistema IP varía de un proveedor a otro. En la mayoría de los casos es casi lo mismo que agregar un nuevo teléfono SIP. Al igual que con los teléfonos IP, hay muchos fabricantes que hacen timbres de puerta muy modernos. Algunos pueden ser compatibles con el servicio de VoIP que utilizas, mientras que otros no. La forma más fácil de encontrar el hardware que necesitas es consultar a tu proveedor de servicios VoIP. Lo más probable es que tengan una lista de dispositivos compatibles para clientes con el mismo tipo de negocio que el tuyo.
El sistema consta de 3 partes principales: el timbre de la puerta o interfono, el mecanismo de bloqueo y tus teléfonos IP. Tu nuevo timbre vendrá con instrucciones para configurar el dispositivo, cómo conectarlo a las cerraduras e incluso ayudarte a configurar el dispositivo en tu red. Una vez que hayas terminado de instalarlo, el interfono funcionará como cualquier otro teléfono IP en la red. Algunos interfonos disponen de funciones adicionales que pueden ser útiles como botones retro-iluminados para evitar los contraluces, acabados resistentes a la intemperie, registro automático, etc. Casi todos los interfonos son compatibles con el protocolo SIP que más se utiliza.
¿Cómo funcionan?
Los timbres de la puerta generalmente vienen con su propia interfaz web para la configuración. Puedes cambiar las configuraciones como el volumen del timbre, la duración del pitido o el botón que abrirá la puerta.
Un caso típico podría ser el siguiente. Supongamos que una empresa ha configurado el interfono en la entrada de su almacén para proteger su inventario más confidencial. Un visitante puede presionar un determinado botón para llamar dentro del edificio. Una vez que se compruebe que la visita está autorizada, un empleado podrá abrir la puerta.
Ventajas de usar un timbre para la puerta
La razón principal para utilizar estos interfonos es para mejorar la seguridad dentro de un entorno comercial o laboral. No todas las empresas disponen de espacios donde el público pueda vagar libremente, tal como una tienda o incluso una cafetería. Otras organizaciones necesitan garantizar áreas específicas. Sea cual sea la razón, los interfonos son un método excelente para asegurar que solo los usuarios autorizados tengan acceso.
Pero el uso de los interfonos tiene otros beneficios también. Por ejemplo, los empleados no pierden el tiempo abriendo la puerta cada vez que suena la campana. Esto a menudo resulta útil en edificios con oficinas múltiples. La persona que toca al timbre puede estar buscando otro negocio, no el tuyo. En este caso, un miembro del personal perderá 5 minutos en caminar hacia la puerta, responder la consulta y luego volver a sentarse en su mesa. Si esto sucede con frecuencia en tu oficina, el tiempo perdido se acumulará rápidamente.
El cambio a VoIP ofrece flexibilidad al sistema de seguridad también. Por ejemplo, puedes cambiar el número de teléfono que responde al timbre de la puerta cuando la situación lo requiera. Incluso puedes configurar grupos para que la persona más cercana o quien esté libre en ese momento pueda abrir al visitante. Esto significa que te aseguras de que un cliente o socio comercial no se quede en la puerta sin una respuesta porque alguien no está en su mesa.
La mayoría de los proveedores de servicios contarán con recursos útiles para las empresas que deseen configurar un timbre de puerta e integrarlo con el sistema de IP.
¡Pruébalo y comprueba si tu empresa también puede beneficiarse de un timbre para la puerta!
